La comunidad de Texas, Estados Unidos, se encuentra consternada tras la muerte de Dawson, un niño de 3 años, cuyo fallecimiento derivó en una investigación que apunta a un presunto caso de violencia prolongada.
El menor murió luego de haber sido trasladado de emergencia a un centro médico, donde especialistas identificaron traumatismo craneoencefálico y hematomas en diferentes etapas de evolución, signos que indicaban posibles agresiones repetidas.
El hecho ocurrió cuando el niño estaba bajo el cuidado de Christopher Alexander, pareja de la madre.
De acuerdo con la información presentada por las autoridades, el hombre habría sido la persona responsable de las lesiones que terminaron con la vida del menor.
En paralelo, la madre, Chelsea Berg, también fue detenida. La Fiscalía la acusa de homicidio capital por haber dejado al niño con Alexander aun cuando conocía que el pequeño presentaba lastimaduras previas, según se desprende de una serie de mensajes intercambiados entre ambos adultos.
Los investigadores señalan que estos registros de comunicación muestran que la madre tenía conocimiento de las heridas del niño y, pese a ello, permitió que continuara bajo el mismo cuidado.
Este elemento, según los documentos judiciales, respalda la imputación en su contra.
Por su parte, Christopher Alexander enfrenta igualmente un cargo de homicidio capital, ya que las autoridades consideran que sus acciones derivaron directamente en el deceso del menor.
El padre biológico de Dawson manifestó su profundo dolor por la pérdida de su hijo y expresó su gratitud hacia los equipos policiales y médicos que intervinieron en el caso.
También destacó que pudo acompañar al niño en sus últimos momentos, gesto que calificó como un acto de humanidad por parte de quienes participaron en la investigación.
Las autoridades continúan recopilando pruebas para esclarecer completamente lo sucedido y determinar con precisión las circunstancias que llevaron a la muerte del menor.




